Todos estamos de acuerdo en que lo más difícil de eliminar de nuestros baños es el fastidioso sarro. No importa que tan bien tallemos las superficies o cuanto nos esmeremos en hacerlo desaparecer, simplemente no lo hace.  

Por ello nos dimos a la tarea de investigar las formas más efectivas de eliminarlo de nuestras vidas para siempre, y aquí te las compartimos.  

1.- Sin químicos agresivos 

Este primer método trata de ser más amigable contigo y con el medio ambiente, pues evita usar químicos potentes o potencialmente peligrosos. Para ello solo requerirás de bicarbonato de sodio y agua oxigenada.  

Mezclaras 125 ml de agua oxigenada en una taza a la que irás agregando poco a poco bicarbonato hasta formar una pasta. Está la colocarás con ayuda de una esponja en esas zonas donde el sarro no sede y la dejarás actuar durante al menos 20 minutos. Después procederás a tallar y enjuagar con agua. Y listo, el sarro habrá desaparecido.  

2.- Aplica refresco  

El uso de refresco de cola es el método más popular y recomendado entre amas de casa. Para ello solo tendrás que verter la soda en las áreas problemáticas, dejarlo actuar en un periodo de 30 a 50 minutos para luego proceder a tallar con un cepillo o esponja.  

3.- Estrategia infalible 

Si con los dos métodos anteriores no lo has logrado eliminar es momento de usar las armas pesadas. Para esta alternativa aplicaremos primero cloro en la zona problemática y dejaremos actuar por al menos 15 minutos.  

Después procederemos a tallar vigorosamente, esto habrá eliminado las manchas más problemáticas. Después aplicaremos en las zonas restantes una mezcla de una taza de vinagre, media taza de bicarbonato y una taza de agua, dejaremos reposar por una hora antes de volver a tallar y enjuagar con agua limpia.  

4.- última opción  

Si probando todo método o consejo el sarro no sede, quizá tu última opción es utilizar un químico abrasivo que asegure la completa eliminación del sarro. Para ello recurriremos al amoníaco.  

El proceso es el siguiente, en media tina de agua agrega un chorrito de amoniaco y diluye. Con ayuda de esta mezcla limpiarás en las zonas problemáticas junto a una esponja o un cepillo, y listo, el sarro debería salir sin problemas.  

Recuerda que para proceder a la limpieza siempre procurarás utilizar guantes y mascarilla, especialmente al utilizar químicos fuertes. Procura también siempre mantener la zona de limpieza ventilada y libre de humedad.  

Para cualquier situación ten a la mano los números de emergencia y un contacto que pueda brindarte asistencia inmediata.